Nutrigenómico que ayuda a reducir la intensidad de los síntomas de estrés.
Contribuye a mantener el equilibrio del sistema nervioso central. Ayuda a disminuir los síntomas centrales, como ansiedad, problemas de concentración y memoria.
El estrés se origina en los pensamientos y emociones que influyen en los sistemas nervioso central e inmunológico, activan el circuito de estimulación que pone en juego el eje hipotálamo-hipófisis-suprarrenal y, así provocan un flujo de reacción en todo el organismo.
El estrés se genera cuando se produce un desequilibrio en el intercambio iónico gestionado por los neuromediadores a nivel celular. La cantidad e intensidad de requerimientos dan lugar al agotamiento de la reserva nutricional (oligoelementos, aminoácidos, glucosa, antirradicales) causando así una deficiencia.
El estrés es necesario como medida de adaptación instantánea y adecuada a diversas situaciones: Es un factor de evolución. Es un elemento esencial para la actividad y la base del estado de vigilancia.
Cuando las exigencias de una situación exceden la posibilidad de control, los mecanismos de hiper-reactividad se vuelven nocivos a largo plazo por sus consecuencias cardiovasculares, endocrinas y neurológicas. Los principales signos de disfunción son:
-Angustia, ansiedad, sensación de tensión interior
-Dificultad de concentración, pérdida de memoria
-Irritabilidad, debilidad emocional, inestabilidad
-Dificultad para movilizarse y relajarse
-Dificultad para conciliar el sueño
-Problemas neuro-vegetativos: Palpitaciones, espasmos digestivos
-Problemas hormonales: Alteración del ciclo menstrual
-Descompensación de enfermedades autoinmunes